Cómo la muerte se convirtió en mi renacimiento - Capítulo 233
Capitulo 233
Catalina lo rechaz6 directamente. “No, es asunto tuyo. Voy a regresar*.
El desfile se llevaria a cabo pasado mafiana. Como Catalina le habia prometido a Alejandro que regresaria antes de eso, tenia
que cumplir su palabra.
Teodoro estaba un poco descontento y detuvo a Catalina. “No, gpor qué vuelves? Estamos todos aqui“.
Vuelve a estudiar en la universidad*.
Luego de decir eso, Catalina se fue sin mirar atras.
Teodoro se quedo sin palabras.
Teodoro no esperaba que Catalina le diera semejante razon.
Teodoro pens6: ‘Ella es una magnate de los negocios. Ella no necesita para nada ir a estudiar a la universidad, ,no? Nadie
creeria semejante excusa.
Catalina regreso sola. Jeremias tuvo que quedarse atras para ayudar en las secuelas.
Jeremias reservo un billete de avion para Catalina.
Después de casi 10 horas de vuelo, Catalina finalmente Ilegé al Aeropuerto Internacional de Damasco.
Alejandro escuché la noticia y estaba esperando a Catalina afuera del aeropuerto.
Sin embargo, Catalina fue detenida por un grupo de personas antes de que pudiera salir del aeropuerto.
Un grupo de seis personas bloquearon el paso de Catalina. Le hicieron un gesto a Catalina y le dijeron con frialdad: “Sefiora
Prado, por favor venga con nosotros. Mi amo quiere verla*.
Catalina los miré con frialdad. “No*.
Después de decir eso, Catalina estaba a punto de rodear a esas personas, pero el hombre que estaba al frente bloqued
directamente el camino de Catalina.
“Me temo que no tienes otra opcién*.
Catalina resoplo con frialdad. “;Quién es tu maestro?”
“Sefior Toribio Zufiga”, dijo sinceramente el hombre. Sabia que no habia necesidad de ocultarselo a Catalina.
Catalina fruncio el cefio y se pregunté por qué el abuelo de Alejandro queria verla.
“4Qué pasa si no voy?”, preguntd Catalina.
“Entonces sdlo podemos usar métodos duros y primero tenemos que disculparnos con usted porque usted u otros pueden
resultar heridos*.
Catalina echo un vistazo por el aeropuerto, observando a la gente que iba y venia. Luego noté que habia muchos padres con
nifios pequefios cerca de ella.
Catalina sabia que si peleaba con estos seis hombres alli, seria problematico y podria causar caos.
Catalina penso: ‘No importa nada aunque vaya con ellos, verdad? Después de todo, no me resultara dificil derribarlos.
Capitulo 233
“Esta bien, ire contigo. Vamonos*,
El hombre que iba delante no tenia intencion de irse, pero detuvo a Catalina y le dijo: “No podemos salir por la puerta del
aeropuerto. El sefior Alejandro la esta esperando afuera*.
El hombre que iba delante pens6: ‘;Me tomas por tonto? Si salimos con usted asi, me temo que el sefior Alejandro nos tirara al
suelo directamente en la puerta del aeropuerto’.
Entonces, adonde quieres irte?”
“La puerta es sdlo para el personal”.
Catalina subi6 con ellos al auto y se dirigid directamente a la Mansion Zuniga.
Toribio se senté en la sala, esperando la llegada de Catalina.
Toribio miré de arriba abajo a Catalina, a quien pensd que era joven. Se pregunto qué tenia Catalina de especial que incluso
Alejandro se sentia atraido.
Alejandro parecia estar obsesionado con Catalina. Toribio no podia entenderlo en absoluto..
“ZEs asi como tratas a tu invitado? Le pediste a alguien que me detuviera en el aeropuerto y ahora ni siquiera me sirves un
vaso de agua*.
Al ser mirada por Toribio, Catalina se puso muy triste como si una serpiente venenosa la mirara como si fuera una presa.
“Sefiora Prado, usted es bastante elocuente, como cuando estuvo antes en Buenaventura‘.
Toribio se levanté y caminé hacia Catalina, mirandola fijamente.
Catalina fruncio el cefio y se molesto. “Si no quieres tus ojos, sigue mirandome*.
Toribio qued6 aténito. Su rostro se ensombrecid.
Toribio penso: ‘; Como se atreve a hablarme asi?’
“Es usted realmente valiente, sefiora Prado“.
La gente comtn se habria asustado muchisimo cuando estuviera rodeada por un grupo de hombres vestidos con la misma
Tropa negra.novelbin
Catalina, sin embargo, seguia tan tranquila como si no tuviera miedo de que esas personas realmente la atacaran.
Toribio pensd
Sera posible que ella no tomara en serio a esos hombres en absoluto?*
Toribio de repente se dio cuenta de algo. Penso: ‘;Cdmo puede ser que la chica que le gusta a Alejandro sea una chica comun
y corriente?*
Catalina ignor6 las palabras de Toribio, lo pas6 por alto y se sento en el sofa.
“No necesito que me digas eso. Por qué quieres que venga aqui? Si no hay nada mas, me voy ahora‘, dijo friamente Catalina.
Catalina penso: ‘Alejandro y yo sufrimos el mismo dolor. Al igual que yo, él tampoco recibe el cuidado de su familia. No es
diferente a estar solo. Bueno, Alejandro tiene mas suerte que yo. Al menos su madre lo amo hasta que murid.
Toribio se senté frente a Catalina. Toribio sond amable, pero sus palabras no lo fueron, ya que eran simplemente amenazas.